Los fondos de acciones representan una inversión colectiva en acciones (participación en la propiedad de una empresa). Cuando compras fondos de acciones, te conviertes en accionista indirecto en una cartera diversificada de varias empresas.
Las acciones se negocian en las bolsas de valores y su precio fluctúa en función de diversos factores, incluyendo el desempeño financiero de la empresa, las condiciones económicas generales y las expectativas del mercado. A las acciones se les denomina renta variable.
Desde 1928 el índice de acciones de Estados Unidos ha subido 10% por año en promedio, pero ha tenido fluctuaciones significativas en años específicos, desde +52.6% a –43.8%*.
Dadas las fluctuaciones de los índices de acciones, los expertos recomiendan fondos de acciones para periodos de inversión mayor a 5 años y recomiendan hacer inversiones recurrentes sin importar el nivel del mercado.
Los fondos de bonos son fondos que invierten en instrumentos de deuda emitidos por gobiernos y corporaciones. Cuando inviertes en un fondo de bonos, estás prestando dinero indirectamente a un grupo diversificad de emisores. El fondo recibe los pagos periódicos de intereses (conocidos como cupones) y la devolución del principal al vencimiento de los bonos. Los bonos tienen una fecha de vencimiento y una tasa de interés fija o variable. A los bonos se les denomina renta fija.
Los precios de los bonos pueden fluctuar debido a cambios en las tasas de interés del mercado y a la percepción del riesgo crediticio del emisor.
Desde 1928 los bonos de grado de inversión en Estados Unidos han tenido un rendimiento de 4.8%*.
Dadas las características de los fondos de bonos, los expertos recomiendan los fondos de bonos para inversiones de 2 a 5 años.
Los fondos de renta mixta invierten en una cartera variada de acciones y bonos buscando un rendimiento medio entre bonos y acciones con menos volatilidad. Dadas las características de los fondos de renta mixta, los expertos recomiendan este tipo de inversión para periodos de 3 a 8 años.